vigilantes de prosegur detectan la perparacion de un robo.

Ilegales con múltiples antecedentes delictivos que se movían por el territorio nacional con pasaportes falsos. Así actuaban los sudamericanos detenidos por la policía cuando supuestamente preparaban un robo a una entidad bancaria de Eivissa o a un furgón blindado.La policía entregó ayer en el juzgado de guardia a cinco de los seis detenidos que bien contaban con reclamaciones o bien portaban documentación fraudulenta. Todos ellos quedaron en libertad con cargos y ahora deberán presentarse cada 15 días en el juzgado para estamparan su firma mientras continúan las averiguaciones sobre ellos. Comisaría continuaba ayer realizando gestiones para intentar localizar a las otras dos personas que lograron huir tras sorpresivamente cambiar el método de vigilancia que estaban realizando sobre un furgón cuya dotación los descubrió.

En la carretera

Los dos vehículos que seguían a dicho furgón fueron descubierto cuando el personal de Prosegur que cubría este servicio los detectó a la altura de la nave del mayorista Gross Mercat de la carretera de Sant Antoni durante la misma mañana del pasado martes. La persecución a la que fueron sometidos durante sus distintos trayectos confirmó sus sospechas, que fueron puestas en conocimiento del Cuerpo Nacional de Policía.

Los dispositivos de contravigilancia que se instalaron se vieron importunados por un sorpresivo cambio que realizaron los sospechosos al irse parte de ellos a otro vehículo y tomar otros un taxi. Pese a ello, agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana interceptaron a uno de los coche que había llamado la atención de los vigilantes de seguridad. Una vez parados, los policías cotejaron sus bases de datos y vieron la larga lista de delitos por robo, falsificación y hurto que se le atribuye a muchos de los acusados, así como sus irregularidades en materia de Extranjería, circunstancias por las que sí pudieron proceder a su arresto y no por la sospecha acreditada de que estuvieran siguiendo a un furgón que transportaba dinero.

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IBIZA | R. S. Las cinco personas detenidas en Ibiza el martes de la semana pasada están acusadas de robar 120.000 euros en joyas en Palma, según informó ayer la Policía Nacional. Los presuntos delincuentes, tres mujeres y un hombre de origen latinoamericano, podrían formar parte de una banda que se dedicaba a robar en entidades bancarias y en joyerías de toda España, según la Policía.
El martes por la mañana un furgón de transporte de dinero circulaba por las calles de Vila cuando los vigilantes de seguridad que iban en el vehículo detectaron que un coche les estaba siguiendo. La Policía instaló un dispositivo de seguimiento, tras ser alertada por la empresa de seguridad. Tras una breve persecución los agentes arrestaron a los supuestos ladrones cerca del Gros Mercat, a la salida de Vila.
El viernes pasaron a disposición judicial y la juez Carmen Robles, del Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza, los dejó en libertad con cargos. La Policía aportó más diligencias y la juez Robles envió a los presuntos delincuentes a la cárcel el lunes. El juzgado de Ibiza se va a inhibir en uno de Palma y los arrestados serán trasladados a una prisión de Mallorca, según fuentes judiciales.
Ahora pueden ser imputados por varios delitos; en Ibiza, por la persecución al furgón de la empresa de transporte de dinero, según fuentes próximas al caso. La mayor parte de la investigación se efectuará en Mallorca, ya que en esta isla los miembros de la banda están acusados de robar en varias joyerías los días 28 y 29 de abril: al parecer, sustrajeron joyas por valor de 60.000 euros en un establecimiento de Porto Pí, otras por el mismo valor en otra joyería de Manacor y además intentaron llevarse 30.000 euros en joyas en un tercer establecimiento, en el centro de Palma, según informa la Policía.
Tras estos robos los presuntos delincuentes se trasladaron a Ibiza, según la información facilitada por la Policía. Uno de ellos está acusado además de un hurto perpetrado en un banco del centro de Palma el 3 de noviembre de 2009, en el que sustrajo presuntamente 60.000 euros de una saca que iba a ser transportada en un furgón blindado.
«Es un grupo organizado que ha operado en varias provincias españolas y en países de Europa», informa la Policía, que acusa además a los cinco detenidos de utilizar identidades falsas y de falsificar documentos, delitos por los que también pueden ser imputados en Ibiza, según fuentes judiciales. Los miembros de la banda cambiaban constantemente de alojamiento y utilizaban medidas de contravigilancia para comprobar que no eran seguidos por la Policía. Las grabaciones de las cámaras de seguridad serán claves en la investigación, según fuentes judiciales.
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