Turismo rural activo por la Serranía de Cuenca

Este espacio protegido ofrece tesoros como la Ciudad Encantada.
Emilio Olivares - Madrid - 25/07/2009

España es uno de los países con más parques naturales de Europa, gracias tanto a las condiciones naturales como al alto grado de conservación. La Serranía de Cuenca es un lugar ideal para hacer turismo rural activo y para disfrutar de la naturaleza, unas fauna y flora excepcionales. Está pensada para ser recorrida a pie, para ver de cerca todos los tesoros naturales que alberga. Por este motivo es un espacio protegido.

Una de las zonas más espectaculares de la Serranía es la llamada Ciudad Encantada. Son piedras erosionadas por el paso del tiempo que en algunas ocasiones parecen esculpidas por el hombre debido a su forma. Dicen que algunas tienen aspecto de perro o ballena. Estas formaciones han servido de inspiración a muchos artistas para crear sus obras. A causa de la erosión, podemos visitar los Callejones de las Majadas. El efecto del agua, el viento y el hielo han creado pasadizos con formas un tanto particulares. Otro paraje de este bello parque natural que merece atención es el nacimiento del río Cuervo, que fue declarado monumento natural en 1999. El nacimiento se encuentra en la Muela de San Felipe, formada por materiales calcáreos del cretácico superior.

El monumento natural Hoz de Beteta es uno de los cañones fluviales más espectaculares de toda la provincia que presenta vertientes como cascadas, desprendimientos, meandros y cavidades. Las formaciones vegetales más relevantes de la Hoz se encuentran en los rincones más húmedos en el centro del cañón, donde el clima es más templado que el resto de la formación natural. Son más de 70.000 hectáreas de pinos negrales, sauces y tilos. La rica fauna que habita en estas tierras de Castilla-La Mancha son mamíferos, aves y peces que sobreviven gracias a la diversidad vegetal y al clima mediterráneo que caracteriza a esta zona de la meseta castellana.
En marcha

ABIA DE LA OBISPALIA. El municipio esconde deslumbrantes parajes naturales dentro de la Serranía. Uno de los lugares de mayor interés es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Una bonita parroquia de tres tramos con bóveda decorada con arcos de medio punto.

ALBADALEJO DEL CUENDE. Población agrícola, en el que sobresale la Ermita de las Nieves, en las afueras, del siglo XVII.

ALCALÁ DE LA VEGA. Restos de calzadas romanas que hacen pensar en la XXXI Vía Romana o Camino de Antonino, y tumbas y crismones visigodos que aseguran un asentamiento entre los siglos IV y VIII, pregonan la antigüedad de la localidad. Su castillo es considerado el más antiguo de Cuenca.

ALCANTUD. En sus inmediaciones se encontraron ruinas romanas. Poco antes de llegar, un camino a la derecha lleva a los Baños de Alcantud, balneario de aguas termales, con propiedades medicinales. Frente al pueblo sale una pista forestal que conduce a la Hoz de los Toriles y a la Hoz de Tragavivos.

ALCOHUJATE. Destaca la Iglesia de la Natividad que presenta dos grandes contrafuertes en la cabecera, lo que hace sospechar que en su origen la forma era diferente. La puerta principal es un arco de luz con arco de medio punto flanqueado por pilastras con glóbulos en sus remates.
Un alto en el camino

COMER. Asador de los Manchegos. Situado en la localidad de Tarancón, ofrece una cocina castellana para deleitarse con su recuerdo.

Mesón El Torno. Se encuentra magistralmente ubicado en Cuenca, fusionando tradición y calidad, un sabor inconfundible con las mejores carnes y el toque que la barbacoa de leña da a sus platos.

Las rejas. Situado en Las Pedroñeras, en el interior de una antigua casa solariega cuyo nombre proviene de las rejas que decoran sus ventanas, fue fundado en 1985 por Manuel de La Osa, uno de los mejores cocineros de España.

DORMIR. La Terma. El Spa se encuentra situado en el Hotel Villa de Alarcón, en la población del mismo nombre, dentro de la comarca La Manchuela. Tiene instalaciones con diseño elegante y moderno, y ofrece actividades como piragüismo, rutas a caballo y senderismo.

Casa Herreros. Está situada en la Encomienda de Alcahozo, un bello paraje natural de Rada de Haro. Una casa recientemente restaurada, la que el entorno natural que la rodea crea un hermoso contraste con el toque vanguardista y minimalista del edificio.