Los hurtos se disparan en el centro comercial Luz Shopping

A los comercios que conforman el gigante empresarial de Luz Shopping no les cuadran las cuentas. Cada día al llegar la hora de cierre hacen caja y seguro que los números no encajan con las previsiones iniciales. El motivo es que de forma diaria los hurtos se multiplican en estos establecimientos y la Policía Nacional prácticamente tiene destinada allí una patrulla con lo que, todo sea dicho, se resta seguridad en otros lugares más necesitados de ella.
Fuentes del Cuerpo informaron de este hecho, asegurando que el delito se repite una y otra vez dentro de una forma asombrosamente fácil de robar en un comercio. Cualquier cosa, desde un GPS hasta un simple pañuelo es susceptible de sustracción y los vigilantes de los locales suelen pillar a estas personas, que son retenidas hasta que llegan los agentes.
«Muchas veces ocurre que al filo del cierre han cogido a alguien aunque sea con un pañuelo -explican estas fuentes- y han llamado a la Policía, con lo que un coche se tiene que desplazar hasta allí. De tres patrullas que hay ahora mismo en la calle, una está casi permanentemente allí». El problema, además de lo que supone para los empresarios, es que esta atención que requiere la situación se desvía de otras más prioritarias, algo que se agrava si se tienen en cuenta los escasos recursos de la Comisaría jerezana.
«Parecemos nosotros su seguridad privada -se lamentan-, y muchas veces nos hacen ir para algo que vale 10 céntimos, es una situación que hay que arreglar». Y es que los vigilantes de las tiendas se limitan a cumplir su función que no es otra que velar para que nadie robe en su interior y, en el caso de no conseguirlo, interceptar al delincuente hasta que llegue la Policía.
Sin embargo, ahí finaliza su intervención, pues ni siquiera están autorizados para pedirle la documentación al sujeto en cuestión. Área Sur tampoco se escapa de este fenómeno, especialmente Primark, donde se ha vuelto habitual el hacerse con algo ajeno. No obstante, la novedad del complejo recientemente inaugurado ha provocado que la atención fundamental se centre en Luz Shopping.
Los agentes, por su parte, consideran que la situación perjudica seriamente la atención en materia de seguridad al ciudadano por lo que han concertado una cita con el comisario para tratar directamente el asunto. Además, tienen intención de llevarlo a la próxima Junta de Seguridad para que todos los estamentos sean conscientes del problema y se pueda solucionar lo antes posible.

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Eso se soluciona metiendo a los delincuentes en la cárcel... ¿o pretenden que los vigilantes dejen robar a sus anchas a los delincuentes para no darles trabajo?.

Un saudo.

PD.: Por lo visto ahora van a estar mal vistas las detencciones de los delincuentes.

por desgracia lo han estado siempre somos amigos de pasar y hacer dejacion de funciones siempre pensamos que la culpa la tiene el otro afortunadamente no todo el mundo opina y hace lo mismo pero yo que vivi y aun por poco tiempo veo el tema desde los dos lados lo vi y veo asi que de todas maneras a no desanimarse y a seguir cumpliendo cad uno nuestra obligacion,saludos lucas

Se han convertido en poco tiempo en el paraíso del consumismo jerezano e incluso de la provincia. Sin embargo, ese alto nivel de ingresos tiene su cruz, y ha ido parejo de una oleada de robos que sacude los cimientos de los comercios de Área Sur y Luz Shopping. Si hace unos días este medio publicaba que los hurtos se estaban disparando, ahora han trascendido datos exactos que evidencian lo preocupante de la situación.
Como han facilitado fuentes de la Confederación Española de Policía, los agentes intervienen en dos o tres robos al día repartidos entre las dos superficies mencionadas, lo que equivale a una media de 80 al mes. Unas cifras alarmantes que muestran, según los profesionales, que existen unas carencias evidentes en materia de seguridad. No obstante, los vigilantes de las empresas privadas poco más pueden hacer que retener a los que cometen los hurtos hasta que llegue la Policía, puesto que ni siquiera están autorizados para pedirles su identificación.
«Todo esto tiene un problema añadido -argumentaron estas fuentes-, y es que los hurtos suelen producirse por la tarde, en horas de cierre que coinciden con nuestros relevos. Estamos solo con tres coches y en ir y volver, levantar las actas, acercarnos a Comisaría y demás empleamos hora y media».
Cantidades nimias
En la mayoría de los casos, como aseguran, se trata de productos de cantidades irrisorias cuya sustracción la empresa siempre está obligada a denunciar. Con la falta de recursos humanos del Cuerpo, la consecuencia de todo ello es que las patrullas que no acuden a este servicio tienen que abarcar un campo aún más amplio y en muchas ocasiones se tarda hasta 15 minutos en responder a una llamada ciudadana.
Por ello, cada vez es más frecuente que la Policía Nacional derive muchos avisos a la Local, aunque se trate de materias cuya competencia pertenece a la primera y se considere algo prioritario, enmarcado dentro de la seguridad ciudadana o la violencia de género. Una cuestión que, junto con los recortes salariales del Estado, está mermando los ánimos de los agentes, que esperan como agua de mayo la dotación de 53 nuevos funcionarios que contribuyan a suavizar la situación de precariedad en la que trabajan.

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