La marcha va sobre ruedas

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La marcha va sobre ruedas

La empresa sanluqueña Disco Tour propone un innovador servicio de autobús como alternativa al uso del coche para salir de fiesta por toda la provincia
Diego Marchán / Cádiz | Actualizado 13.12.2009 - 14:01


Integrantes del autobús que les llevó ayer de marcha por distintos lugares de ocio.

Fin de semana, llega la hora de pasarlo bien. Sin embargo, en la provincia de Cádiz las opciones de ocio son más bien escasas y un rato de diversión implica para muchos coger el coche hasta localidades vecinas, aguantar interminables colas a la puerta de los locales de moda y, finalmente, emprender el camino de vuelta a casa a altas horas de la madrugada con la obligación de no suspender el examen del alcoholímetro. Demasiadas dificultades.

Ante esta tesitura, el sanluqueño Fermín López se propuso convertir en negocio la utopía: un servicio de puerta a puerta en el que los desplazamientos, las colas y los puntos del carné ya no sean factores a tener en cuenta. Esta iniciativa, que Fermín plantea como "una alternativa real a tener que coger el coche por la noche para salir", comenzó a gestarse en su mente el pasado verano, al comprobar que los jóvenes de su localidad se veían obligados a emigrar cada fin de semana a ciudades vecinas como El Puerto o Jerez para vivir sus noches de ocio. Así vio la luz hace poco más de un mes la empresa Disco Tour y su Bus de la Marcha.

Desde entonces, el bus ya ha vivido tres noches de diversión y, gracias al boca a boca, a la publicidad en radio y televisión locales y a las redes sociales como Tuenti y Facebook, tiene muchas más por delante. Despedidas de soltero y cenas de empresa y amigos, aprovechando la inminente llegada de las fiestas navideñas, son algunos de los viajes que están por llegar. Y este es sólo el principio.

Disco Tour plantea a los jóvenes una noche diferente que comienza en la misma puerta de su casa. Un autobús "equipado con luces y sonido profesional" recoge a los noctámbulos en torno a las once de la noche y los lleva directamente hasta los locales concertados por la empresa, entre los que se encuentran Lalola, Lacre Copas y Bereber en Jerez; o Reconquista y Gavana en El Puerto, según la ruta escogida por los usuarios. En las discotecas, los viajeros cuentan con trato VIP gracias a unas pulseras que les identifican como pasajeros del Bus de la Marcha y su única ocupación es la de divertirse hasta que, sobre las seis y media de la mañana, deban emprender la vuelta a sus hogares. Además, empleados de seguridad privada velan continuamente por los jóvenes, "una tranquilidad para los padres, ya que la seguridad está en todo momento con los chicos", explica Fermín. El viaje, la entrada a los locales y la primera copa van incluídos en el precio, todo en torno a 30 euros.

El empresario sanluqueño cuenta con los vehículos de una empresa de transportes de su localidad para su particular iniciativa, aunque su idea para el futuro es "coger un autobús más antiguo, adecuarlo y dejarlo sólo para esto". Así podría habilitarse dentro del propio vehículo una zona para el baile y facilitar que los viajeros puedan tomarse una copa antes de llegar a su destino. Que el bus no sólo sea el transporte sino que forme parte de la fiesta.

Sin embargo, los requisitos que demanda la Administración para convertir El Bus de la Marcha en un bar rodante "son interminables" y exigen un tremendo desembolso en permisos y licencias, demasiado por el momento. Quién sabe si en el futuro...

Aunque Disco Tour apenas está despegando, Fermín piensa que el camino que debe tomar su empresa debe conducirle a "expandirse por toda la provincia y que haya un bus en todos lados". De Sanlúcar a la Sierra pasando por el Campo de Gibraltar, Disco Tour lleva la fiesta a cualquier rincón de la geografía gaditana, aunque suponga al empresario "horas y horas al volante".

Un esfuerzo que ya está encontrando sus primeros frutos y que está permitiendo a Fermín López llenar poco a poco las páginas de su agenda. Un nuevo día, un nuevo viaje y una nueva fiesta sin los peligros del volante, la incomodidad de las colas y con la odisea de la vuelta a casa resuelta. Un billete de ida, y a disfrutar.