La Policía investiga una autolesión con un utensilio que el cuerpo vetó. El SUP lo había denunciado ante Jefatura y en el Consejo de Policía

La Policía investiga una autolesión con un utensilio que el cuerpo vetó. El SUP lo había denunciado ante Jefatura y en el Consejo de Policía

El Departamento de Asuntos Internos del Cuerpo Nacional de Policía interrogó ayer a cuatro agentes destinados habitualmente en los calabozos de la Jefatura Superior de Aragón por su presunta relación en el episodio en el que, hace unas semanas, una detenida se autolesionó en un brazo con una cucharilla de plástico con la que se hizo varios cortes. De los cuatro, uno estaba de baja y otro de vacaciones cuando se produjo el incidente.

Se da la circunstancia que el uso de utensilios como las cucharas de plástico fue prohibido por el propio cuerpo el año pasado, aunque posteriormente, al aplicar un sistema de menú precocinado, la Jefatura Superior volvió a distribuirlos en los calabozos.

El peligro del empleo de esos utensilios fue denunciado por el Sindicato Unificado de Policía (SUP) ante la propia Jefatura y ante el Consejo de la Policía por la vía de prevención de riesgos laborales. Los inspectores de la Secretaría de Estado de Seguridad elevaron el 13 de enero del año pasado un informe al número dos del Ministerio de Interior en el que reseñaban "anomalías funcionales y estructurales susceptibles de ser recomendadas para su debida corrección, al objeto de mejorar las condiciones materiales, físicas y de seguridad, en que se desarrolla la estancia y custodia de los detenidos". Los inspectores atribuyeron un "potencial riesgo lesivo" al vaso que se entregaba a los detenidos cuando llegaban al calabozo, por lo que recomendaron cesar tanto su distribución como la de "cualquier otro elemento que pudiera servir a estos u otros fines no deseables". Poco después, la Jefatura aragonesa prohibía la entrega de "recipientes de ningún tipo" a los detenidos e, incluso, retirar el envoltorio de los bocadillos "en el momento de su entrega".