El SUP y la AUGC de Toledo reclaman más seguridad en los alrededores de los cuarteles

El SUP y la AUGC de Toledo reclaman más seguridad en los alrededores de los cuarteles

El secretario general de la Delegación de Toledo de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGG), manifestó ayer el deseo de que haya más seguridad en los alrededores de los cuarteles, por lo que la zona próxima a los mismos debería permanecer limpia de vehículos u otros objetos susceptibles de ser utilizado para cometer un atentado.

Así lo señaló ayer en rueda de prensa junto al secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Juan Hernández, donde sostuvo que desde la organización quieren concienciar a los ciudadanos, ayuntamientos y a los propios vecinos que viven cercanos a los cuarteles.

«No entendemos que en algunos acuartelamientos no se quieran talar árboles que impiden la vigilancia», señaló García, que además apuntó la necesidad de reducir aquellas casas cuarteles que por su escasez de componentes y la falta de operatividad carecen de las medidas de seguridad «mínimas e imprescindibles».

Asimismo, García declaró que «muchos» de los atentados son «difíciles de evitar», pero que los últimos que ocurrieron en Burgos y en Palma de Mallorca «sacan a la luz deficiencias inaceptables», que, según García, «deberían haber sido subsanadas hace muchos años».

«AUGG y los guardias civiles no vamos a permanecer con los brazos cruzados esperando el próximo funeral», resaltó el secretario, quien además aseguró que se trata de la exigencia del derecho más fundamental, «el de disponer de la máxima

seguridad posible». Lamentó, además, que cuando se producen averías en algunos sistemas de seguridad de los cuarteles de la provincia de Toledo se tarda «demasiado tiempo» en repararlos. Trató además sobre la seguridad «del día a día» de los guardias civiles, y destacó el «buen hacer» del delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz Cano, así como del subdelegado del Gobierno en Toledo, Francisco Javier Corrochano, en la mejora de los medios laborales de los guardias civiles. Según explicó García, todo vehículo policial dispone de dos chalecos antibalas, al igual que todas las unidades operativas acordes a sus necesidades como son los grupos de investigación, «gracias al buen entendimiento y a la comprensión que se ha tenido sobre

nuestras más elementales necesidades».

No obstante, señaló que desde AUGG siguen «con una antigua demanda encima de la mesa», que es la que solicita que todos los componentes de las patrullas dispongan de guantes anticorte, y apostilló, además, que desde la organización demandan otras cosas, entre las que se encuentran que los traslados de los detenidos se realice en vehículos mampara.
Además, García criticó que los vehículos celulares obligan a llevar unos asientos que no disponen de «los más básicos elementos de seguridad», por lo que los agentes están expuestos a que tengan un accidente y sufran «consecuencias irremediables». «Parece que es más económica la muerte de un guardia civil que la prohibición total del uso de estos asientos o su adaptación», sostuvo.