Balacera en el Metro; dos muertos y ocho heridos

Mexico DF
A partir de hoy vigilarán las 175 estaciones del STC mil 50 elementos de la SSP capitalina, es decir, dos por turno. El detenido declaró no estar arrepentido; “es una persona confusa”: el procurador Mancera.
Desquiciado y fuera de control, un sujeto armado que profirió consignas contra el gobierno en nombre de Dios, desató una balacera en el interior de la estación Balderas del Metro que mantuvo en vilo a pasajeros y autoridades durante más de 10 minutos. El saldo fue de dos muertos —un policía y un civil— así como ocho lesionados, entre ellos el sospechoso, quien fue capturado y anoche declaró que no se arrepiente de lo sucedido.

“Este gobierno de criminales LTI”, escribió el presunto agresor Luis Felipe Hernández Castillo, de 38 años, en una de las paredes del andén de la Línea 3 que va de Universidad a Indios Verdes. Eran alrededor de las 17:14 horas cuando un elemento de la Policía Bancaria e Industrial le reclamó la pinta y en respuesta fue asesinado de un tiro en la espalda.

Entonces empezó el caos en esa zona de la estación Balderas, donde en ese momento había alrededor de mil usuarios. El policía Víctor Manuel Miranda Martínez se había acercado, desarmado y sin chaleco antibalas, al sospechoso quien portaba un revólver calibre 38 especial.

Este hombre —quien en sus primeras declaraciones ministeriales dijo que actúo solo y que sabía bien lo que hacía—, advirtió a los pasajeros del convoy que la agresión no era contra la sociedad civil sino contra el gobierno por órdenes de Dios.

Con el arma en la mano exigió a la gente —entre la que había niños y mujeres— que comenzara a rezar, mientras él gritaba que “este era un gobierno de rateros”, que “el Estado mexicano tenía muerta de hambre a la gente” y que “les había quitado sus derechos”.

La actitud del sujeto provocó que algunos usuarios se agazaparan dentro de los vagones, aunque Esteban Cervantes Barrera, de 58 años y de oficio albañil, decidió enfrentar al agresor, con quien forcejeó en un intento por desarmarlo.

Sin embargo, resbaló en varias ocasiones mientras le disparaban, hasta que finalmente un proyectil le dio a quemarropa en el pecho, provocándole la muerte.

En ese momento, llegó un grupo de la Policía Judicial del Distrito Federal contra quienes disparó al menos en tres ocasiones.

El presunto homicida resultó lesionado de un rozón de bala en el hombro derecho y entró al vagón para reabastecer su revólver ya que había efectuado seis tiros.

Los judiciales lograron someter al delincuente, quien después de ser golpeado por varios pasajeros fue trasladado al Hospital Rubén Leñero en calidad de detenido.

El procurador general de Justicia del DF, Miguel Ángel Mancera, informó que cuatro personas más resultaron lesionadas aunque ninguna de gravedad.

“Los agentes de la Policía Judicial realizaron un cerco por dos flancos y en una acción de heroísmo, al igual que la del civil que murió, uno de los compañeros lo enfrentó de manera directa, pese a que éste seguía efectuando disparos”.

El presunto agresor fue dado de alta del hospital y por la noche trasladado a la agencia 50 del Ministerio Público, donde el procurador encabezó el interrogatorio.

Mayor vigilancia

Tras la balacera, a partir de hoy mil 50 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina —repartidos en tres turnos— vigilarán las 175 estaciones que comprende el Sistema de Transporte Colectivo, es decir, dos policías por turno.

Aleatoriamente, se realizará a los usuarios, en “horas pico”, una revisión con el equipo denominado Garrets o tubos detectores de metal, pero sólo en algunas estaciones.

En conferencia de prensa, el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard, dijo que de acuerdo con los procedimientos establecidos en los metros de Londres, Madrid y Tokio, que son los mismos que los del DF, se realizará la revisión a los usuarios, “prácticamente imposible revisar al ciento por ciento al mismo tiempo”.
Por otra parte, Manuel Mondragón, Secretario de Seguridad Pública local, confirmó el fallecimiento, “en una acción heroica”, del policía 42236, Víctor Manuel Miranda Martínez.

“La familia tendrá un millón de pesos de su seguro de vida, se cumplirán exhaustivamente los gastos funerarios y veremos que la pensión para sus deudos sea la pensión vitalicia”.

Por otra parte, el secretario de Salud del DF, Armando Ahued informó que durante la balacera se registraron ocho heridos, cinco fueron por proyectil de arma de fuego y tres que se cayeron y rasparon.

El interrogatorio

A las 23:30, después de interrogar personalmente al homicida por espacio de media hora, Mancera adelantó en la agencia 50 que el detenido refirió que sus acciones de protesta son para alertar sobre el calentamiento global y la hambruna.

Declaró además que llegó el miércoles procedente Jalisco, que se hospedaba en un hotel de Observatorio, que llegó a la Ciudad de México con la intención de transmitir su mensaje y que el arma la traía para su defensa personal.

Además, dijo que se dedica al campo, es veterinario y tiene un ingreso de 5 mil pesos al mes, cantidad que traía al momento de su detención.

Manifestó igualmente que no está arrepentido de lo que hizo, pues cuando se le acercó el policía lo consideró un acto de agresión, y reveló que ya había realizado otras pintas en la ciudad. Inclusive, en su mochila se le hallaron marcadores.

Su discurso, caracterizado por su incoherencia, hace constantes referencias a la Biblia, explicó el procurador; “es una persona confusa”.

Cuatro casos en 15 años

La balacera de ayer en la estación Balderas no es la primera que ocurre en ese medio de transporte, ya que en los últimos 15 años se han registrado por lo menos cuatro balaceras.

La más reciente ocurrió en febrero de 2007, cuando en los andenes de la estación Panteones se registró una balacera protagonizada por dos sujetos que atacaron a un elemento de la AFI.

En 2006 ocurrieron dos. La primera en abril, cuando un sujeto se enfrentó a policías del Estado de México durante una persecución que llegó hasta los talleres de la estación Ciudad Azteca, de la Línea B del Metro. En mayo, afuera de la estación Balderas, se registró una balacera entre judiciales y delincuentes que provocó la muerte por bala perdida del supervisor de la Línea 3.

La cuarta balacera ocurrió el 28 de septiembre de 1995 en la estación La Raza, cuando un judicial disparó contra siete pasajeros dentro de un vagón, lo que provocó la muerte de dos personas y lesionó a cinco más.