El Real Valladolid-Sporting, de alto riesgo

* El club blanquivioleta doblará el número de efectivos
* El frío y la Navidad reducirá la llegada de gijoneses

Arturo Alvarado | Valladolid
Actualizado sábado 19/12/2009 10:55 horas

El fútbol es territorio para dar rienda suelta a las más altas pasiones pero, por desgracia, para algunos es campo abonado para sacar sus más bajos instintos. Ésta es la razón por la que la Comisión Nacional contra la Violencia en los Espectáculos Deportivos, dependiente del ministerio del Interior, ha declarado el encuentro del domingo entre Real Valladolid y Sporting de Gijón de alto riesgo.

La medida no es nueva, pues ya la pasada temporada el partido entre castellanos y asturianos recibió tal calificativo, a causa del problema suscitado con el precio de las entradas y el masivo desplazamiento de aficionados sportinguistas. En esta ocasión no existe problema con el precio de las localidades, pero en Interior saben que llegarán muchos seguidores del conjunto rojiblanco y que ambas hinchadas no guardan precisamente una relación fraternal, pese a que el lunes se escenificó en la capital de la Costa Verde una reconciliación pública entre los presidentes de ambos clubes y de las asociaciones de hosteleros de las dos ciudades.

Sin embargo, es posible que el punto que más haya contribuido a extremar las medidas de seguridad sea la pelea registrada el pasado domingo entre los grupos radicales del Sporting (Ultra Boys) y el Sevilla (Biris Norte) por las calles de Gijón, con dos centenares de hooligans envueltos en una refriega saldada con trece heridos leves y uno grave. Éste fue un chaval sevillista de 17 años al que han debido colocar una prótesis de titanio en el cráneo, ya que un botellazo le fracturó la cabeza.

El número de efectivos de la Policía Nacional se verá doblado por estas causas respecto del habitual destinado a los partidos de Zorrilla. De igual modo, el Real Valladolid duplicará el de sus vigilantes de seguridad. "Pasaremos de los veinte con que contamos para encuentros normales a los cuarenta que estarán el domingo en el estadio. Primero se ubicarán en muchas de las puertas de entrada para evitar problemas y después vigilarán las gradas del estadio», comenta a EL MUNDO Jorge Santiago, director de Operaciones de la entidad pucelana.

Las circunstancias meteorológicas y quizá la cercanía con la Navidad han provocado que la afluencia de hinchas sportinguistas sea considerablemente más reducida de lo previsto. "De los casi 4.000 que pensaban venir, se han quedado en poco más de la mitad. Les enviamos 3.200 entradas, más 500 que compraron por Internet. De esas 3.200 nos han devuelto 1.600, la mitad, de forma que esperamos que lleguen entre 2.000 y 2.500 aficionados del Sporting", explicó Santiago, que pide a todos los espectadores que suban antes a Zorrilla para evitar colas. "Siempre será peor pasar frío esperando fuera que estar dentro del estadio".