Se derrumba parcialmente un edificio en la zona de Bravo Murillo en Madrid

Un edificio de cuatro plantas se ha derrumbado parcialmente esta noche en Madrid poco después de ser desalojado por los bomberos. Gracias a la rápida actuación de los bomberos no ha habido heridos.

"Nos hemos salvado de milagro", explicaba una de las vecinas afectadas. Al parecer, esta noche comenzaron a sentir un ruido, como un crujido, y uno de los vecinos detectó una grieta en el inmueble, situado en el número 6 de la calle Mariano Fernández, del barrio de Bravo Murillo.

A las 21 horas, los propios vecinos avisaron a los bomberos que nada más llegar ordenaron el desalojo inmediato del edificio. A las 21:20 las siete familias habían sido desalojadas. Según fuentes de Emergencias, la causa del derrumbe puede estar en las lluvias de los últimos días, que habrían afectado a los cimientos.

Una vecina del edificio ha denunciado que las causas del derrumbe son la obras que se están realizando en un edificio colindante, en el que "pretenden hacer tres pisos subterráneos".

En declaraciones a Efe, María Isabel Sánchez, que vivía con su marido y sus hijos en una vivienda del edifico derrumbado, ha explicado que sobre las nueve de la noche su marido empezó a escuchar cómo crujían las paredes de la casa. "Hemos mirado al techo y hemos visto cómo se empezaba a abrir", ha dicho la mujer.

Poco tiempo después, con los vecinos ya fuera, el inmueble se ha derrumbado parcialmente y los escombros han cortado la estrecha calle, ha explicado María Isabel. "Quiero responsabilidades, porque hace dos años llamé al Ayuntamiento y me dijeron que ese edificio no se iba a construir", ha denunciado la mujer.

Los vecinos —siete familias— han tenido que salir del edificio con lo puesto. La octava familia que habitaba el inmueble no se encontraba en su vivienda en esos momentos.

Imágenes impactantes

Poco después del rápido desalojo, en torno a las 10 de la noche, se derrumbaba la parte izquierda del inmueble. El resto del edificio tendrá que ser demolido. Según testigos presenciales, las imágenes en el lugar son impactantes.

"Si esto hubiera pasado dos horas después, habría sido una desgracia porque nos habría pillado a todos durmiendo", explicaba la vecina, que acababa de llegar a casa.

Los inmuebles colindantes han sido desalojados para evitar riesgos con los conductos de gas, según fuentes de Emergencias. Aunque se ha cortado el gas en la zona, sigue habiendo un intenso olor.

La calle Bravo Murillo ha sido cortada. De hecho, muchos vecinos que regresan en estos momentos a sus casas no pueden acceder a sus viviendas.

El Samur Social ha ofrecido a las familias afectadas por el derrumbe un alojamiento para pasar la noche. Sin embargo, varios residentes del inmueble derruido —gente mayor que en esos momentos estaba en batín y sin sus móviles— esperan en la zona la llegada de sus familiares.

Emergencias Madrid insiste en que no hay víctimas y que si no contestan los teléfonos móviles es porque estos se han quedado en el inmueble derruido.