Tres detenidos por agredir a los vigilantes de seguridad de Abando

Las víctimas presentaban hematomas y contusiones en la cara y el cuerpo
10.02.10
AGENCIAS | MADRID

Agentes de la Ertzaintza detuvieron anoche en la capital vizcaína a tres varones por agredir a los vigilantes de seguridad de la estación de ferrocarril de Abando que habían acudido a mediar en un altercado que se estaba registrando en el recinto. Según ha informado el Departamento vasco de Interior, minutos antes de las diez de la noche, personal de seguridad de la estación de Abando alertaba a la Policía vasca acerca de tres individuos que acababan de agredir a los vigilantes de la estación.
Los vigilantes, que presentaban hematomas y contusiones en la cara y el cuerpo, explicaron que habían sido agredidos por tres varones que estaban generando problemas y altercados con otras personas que se encontraban en las instalaciones. En el momento en que fueron a intervenir, los agresores se volvieron contra ellos propinándoles patadas y puñetazos, abandonando seguidamente la estación.
Con la descripción de los agresores, los ertzainas iniciaron su búsqueda localizando en una calle cercana a los tres sospechosos. Por el momento los arrestados permanecen en dependencias policiales a la espera de ser presentados ante el juez.
Robo en Etxebarri
Un varón de 34 años de edad fue detenido ayer en Bilbao acusado de perpetrar dos robos con violencia en Etxebarri (Bizkaia) en las últimas dos semanas. Al parecer, este individuo atracó a una mujer en el parking del Metro del municipio y a un taxista, al que amenazó con un cuchillo para que le entregara la recaudación.
Según ha informado el Departamento de Interior vasco, la Ertzaintza inició sus investigaciones el pasado 29 de enero, cuando una mujer denunció haber sufrido un robo en el parking del Metro en Etxebarri. La víctima relato que el robo se había cometido poco antes de las 23:00 horas de la noche en el momento en el que se disponía a salir de su vehículo.
Según ha dicho, un individuo le amenazó con un cuchillo exigiéndole el dinero que portaba. Tras ello, la mujer huyó y avisó al personal de seguridad del metro, mientras el asaltante abandonaba el lugar.
Días después, el 5 de febrero, los agentes tuvieron conocimiento de un segundo robo. En este caso, era un taxista el que había sido amenazado con un cuchillo por un cliente, al que había llevado hasta San Antonio de Etxebarri para que le entregara la recaudación. Tras conseguir el dinero, el atracador abandonó el lugar.
Las pesquisas condujeron a la identificación del presunto ladrón, lo que hacía posible su detención a mediodía de ayer en la calle Bailén de la capital vizcaína. Tras su arresto, el presunto autor de los robos fue trasladado a dependencias policiales, donde se iniciaron las correspondientes diligencias, tras las cuales será puesto a disposición de la autoridad judicial.

Bilbao. Dos jóvenes fueron detenidos la pasada madrugada acusados de agredir a los vigilantes del metro y también a los ertzainas que les intentaron reducir en la estación de Abando. Es la segunda vez en apenas diez días que los vigilantes del metro de esta estación resultan agredidos por alborotadores. Y sucesos parecidos se han producido en otras estaciones en los últimos meses, lo que ha llevado en más de una ocasión al comité de metro a reclamar medidas de seguridad que les protejan.

Los hechos se produjeron sobre las seis y veinte de la madrugada del pasado domingo en la estación de metro en Abando. Las gélidas temperaturas de estos días y la coincidencia de los carnavales probablemente animaron a los jóvenes a terminar la fiesta en el interior del suburbano, donde se encontraban bebiendo y fumando cuando fueron sorprendidos por los vigilantes de seguridad que intentaron sacarles de la estación donde no está permitido beber ni fumar. En ese momento, los jóvenes de 18 y 20 años procedieron a golpear a los vigilantes de seguridad, causándoles lesiones de diversa consideración, según informó el Departamento vasco de Interior.

Ya en el exterior, los alborotadores intentaron agredir también a los ertzainas que se personaron en la estación y que procedieron a su detención. Los jóvenes ha sido acusados de atentado con lesiones y atentado con amenazas.

hace una semana Se da la circunstancia de que el pasado miércoles se produjo otra agresión a dos vigilantes del metro también en la estación de Abando. En esa ocasión, los guardas recriminaron a tres jóvenes alborotadores que a las diez de la noche se encontraban generando disturbios dentro de la intermodal que da acceso al metro y metiéndose con los usuarios que se encontraban en ese momento en la estación. Los vigilantes recibieron patadas y puñetazos y tuvieron que pedir el refuerzo de la Ertzaintza que acudió también para identificar a los tres jóvenes.

El pasado mes de junio un joven de 19 años fue detenido por la Er-tzaintza acusado de un delito de lesiones y otro de atentado contra la autoridad tras agredir a un vigilante del metro y atacar a los agentes que procedieron a su arresto. El incidente se produjo después de que el guarda de seguridad recriminara la actitud del joven por colocar los pies en el asiento, molestar a los viajeros y golpear la puerta de un vagón. También ese caso, el detenido reaccionó a la regañina propinando varios puñetazos al vigilante, que tuvo que reducirlo hasta la llegada de la patrulla de la Er-tzaintza.

En 2008, otros cuatro jóvenes también fueron detenidos por agredir a los guardas de seguridad del metro que les intentaron sacar de la estación donde estaban generando disturbios y molestando a los usuarios.

Recientemente, el juzgado de lo Penal número 3 impuso dos sentencias ejemplarizantes a dos usuarios del metro por dos ataques diferentes perpetrados en 2007 y 2008. Los acusados fueron condenados a 15 meses y tres años y medio de cárcel, respectivamente. La novedad de las sentencias es que el juez determinó que las agresiones constituían un delito de atentado contra la autoridad, delito que se suele reservar para las agresiones hacia los policías.

El comité de metro Bilbao ha denunciado en más de una ocasión la situación de inseguridad a la que se enfrentan y ha reclamado a la dirección nuevas medidas.