Los porteros de discoteca tendrán que sacarse un título

José lleva más de una década ganándose la vida en las puertas de las discotecas de Badajoz. Llegó hasta este trabajo después de ejercer varios años como vigilante de seguridad. «Una cosa te lleva a otra». Ahora, cada fin de semana dirige un equipo de cinco personas encargadas de velar por la seguridad de los que acuden al local Broadway.
Su hoja de servicio está impoluta. En diez años no ha protagonizado ningún altercado serio. Pero no es casualidad. Tampoco suerte. José alega dos razones: formación y profesionalidad.

Por experiencia sabe que para ejercer de portero hay que administrar muchas dosis de sangre fría y mano izquierda. Pero no todos las tienen, y al final, argumenta el portero, «pagamos justos por pecadores».

Aunque esta mala fama puede pasar a la historia en breve. La junta de Extremadura y los ayuntamientos de las principales ciudades de la región, entre ellas Badajoz, quieren regularizar el trabajo de portero de locales de ocio.

No se trata de una medida novedosa, la idea lleva años en la cartera de las administraciones pero la semana pasada recibió un importante espaldarazo en la reunión del presidente de la Junta con los alcaldes. Entre los acuerdos de esa reunión se fijó que los porteros de discoteca tendrán que sacarse un título para ejercer. No se conocen más detalles y tampoco se barajan fechas concretas. Todo queda a expensas de los reglamentos que se desarrollen en la futura Ley de Ocio de Extremadura.

Los empresarios de la noche de Badajoz llevan años pidiendo esta regulación. La razón por la que apremian es muy simple: en la ciudad apenas hay profesionales capacitados para contratar. «Los pocos que realmente valen ya están colocados», explica Juan Luis Barquero, propietario de varias discotecas en Badajoz. El empresario explica que necesitan contratar con garantías a los responsables de seguridad por la responsabilidad que conlleva. «Si vienen con un título o con una formación de alguna academia tendremos más garantías de que están preparados». Barquero también intuye que se va a combatir de manera más eficaz la irregularidad con la que se trabaja en muchos locales. Algunos de los porteros que se contratan compaginan su dedicación de fin de semana con otro trabajo y no quieren que los dueños de los locales les hagan contrato. «Con título oficial en la mano se dignifica esta ocupación», explica Barquero.
En Badajoz se paga en torno a 100 euros la noche y se estila la contratación de cuadrillas de cuatro o seis chicos, dependiendo de las dimensiones del local.

Algunos empresarios también se quejan de que «están un poco desamparados» por las laguna legales que tiene la actual Ley de Ocio. De ahí su insistencia en que la reforma arregle algunos puntos.

Carlos Bernáldes, secretario de la Confederación Empresarial de Turismo de Extremadura, que aglutina a empresarios de la hostelería recuerda que ellos, como organización, han asistido a tres reuniones con la administración para desarrollar el cuerpo normativo de la Ley de Ocio. «Siempre hemos pedido que se recojan las necesidades que tienen los empresarios».
Desde la consejería de Administración Pública no adelantan detalles y los dueños de discotecas y bares tampoco saben más de lo que ya se ha anunciado. A pesar del anuncio político de la semana pasada, el asunto parece que todavía anda en pañales.

Bernáldes explica que incluso una academia de seguridad privada de Badajoz ya se ha puesto en contacto con ellos para impartir la formación, pero que no pudieron cerrar ningún acuerdo por falta de información. «Todavía no sabemos concretamente cómo va expedirse el título ni los requisitos».

Aunque aún esté en proyecto, todo apunta a que se seguirá el modelo de otras comunidades como Madrid o Cataluña que ya han regulado la actividad.
En la comunidad de Madrid, la norma entró en vigor el 5 de abril del año pasado. Los más de 15.000 aspirantes se enfrentaron a una prueba de conocimientos de 50 preguntas y un examen psicotécnico donde se evaluaba la capacidad para soportar situaciones comprometidas. Aquellos que superaron el requisito teórico tuvieron que acreditar que carecían de antecedentes penales para conseguir definitivamente el título. El carné se expide con una validez de cinco años. A partir de 2014 tendrán que renovar el permiso y volver a demostrar que no cuentan con ningún delito. Infringir la ley significará la pérdida de la autorización.


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Aunque no tengan antecedentes penales.. y tengan titulos de portero esas personas estan quitando el puesto a los vigilantes y una cosa no tiene porque llevar a la otra....portero es una cosa y vigilante otra


Adios