Kirchner: 'Volvería a hacer todas y cada una de las cosas que hice

Kirchner: 'Volvería a hacer todas y cada una de las cosas que hice

• Asegura que volvería a impulsar al impuestazo al campo
  
• 'Los únicos periodistas que me gustan son los fotógrafos, porque no hacen preguntas'
  

Por primera vez en los últimos cinco años, un Kirchner en la Presidencia de Argentina brindó una conferencia de prensa. La cita ha sido este sábado entre Cristina Fernández de Kirchner y los representantes de medios de comunicación argentinos y extranjeros en la residencia presidencial del barrio Olivos.


La Presidenta intentó quitarle importancia a este vuelco suyo, tal vez para no quedar en evidencia por su conducta anterior, reñida con la democracia. "Simplemente decidí charlar después de las cosas que han sucedido", dijo Fernández, que 'toreó' con habilidad las preguntas directas.



Sin embargo, el giro de su política de comunicación en verdad parece un intento por remontar la crisis política que atraviesa su Gobierno y el derrumbe de su popularidad, que bajó del 20% de imagen positiva y ya descendió a 19,2%, según un sondeo. No obstante, ella aseguró que "en el gobierno manejamos otras encuestas, pero no vale la pena ingresar en esa polémica" sobre los índices de la opinión pública.
Volvería a impulsar el 'impuestazo'


Frente al declive en que se encuentra su gestión, Fernández de Kirchner dijo que no se arrepiente de nada y aseguró que "volvería a hacer todas y cada una de las cosas que hice" durante los ocho meses que lleva en la Casa Rosada. Incluso mencionó que volvería a impulsar "la resolución 125", es decir el proyecto de 'impuestazo' a las exportaciones de cereales, que durante cuatro meses desató las huelgas, protestas, cortes de carreteras y hasta cacerolazos, hasta que la iniciativa fue rechazada en el Senado.
La Presidenta anticipó que no habrá más cambios en su Gobierno, tras haber perdido a consecuencia de la crisis al 'hombre fuerte' y jefe de gabinete Alberto Fernández; al ministro de Economía, Martín Losteau, y al secretario de Agricultura, Javier de Urquiza.
Fie del silencio mediático


Nunca antes había ocurrido esto en Argentina durante la era Kirchner. Desde 2003 hasta 2007, el entonces presidente Néstor Kirchner jamás accedió a recibir a los periodistas en bloque y contestar sus preguntas. Y hasta ahora su sucesora y esposa repitió esa conducta y tampoco se dignó a atender a los informadores. Solamente podían ingresar al despacho presidencial en la Casa Rosada los 'reporteros' del programa cómico 'CQC', también conocido como 'Caiga Quien Caiga' y de 'Videomatch'.

El llamado 'matrimonio presidencial' rechazó siempre todas las peticiones de conferencias de prensa, así como los pedidos de entrevistas personales solicitadas por los diarios y otros medios de información de Europa y los Estados Unidos.

Solamente Fernández concedió una entrevista a la CNN en su campaña proselitista, en 2007. Allí explicó que "la política comunicacional del Gobierno (de Kirchner) ha sido de un contacto directo con la sociedad". O sea: monólogos en actos y mítines.

Alertada del tema, la Sociedad Interamericana de Prensa envió una misión a Argentina y concluyó que "el Gobierno argentino siente desprecio por la actividad periodística". También denunció que se ejerce la "censura concreta" con algunos medios opositores.
'Amor' por los fotógrafos


El menosprecio o fobia hacia la prensa quedó al desnudo una vez que Kirchner soltó delante de los reporteros gráficos en la Casa Rosada: "Los únicos periodistas que me gustan son los fotógrafos, porque no hacen preguntas". Pero la época en que los Kirchner podían ignorar al periodismo ha pasado y ahora la Presidenta se ve obligada a pasar el rubicón abriendo las puertas de su casa a los reporteros de verdad.

Las claves del derrumbe de la popularidad de los Kirchner se encuentran en la rampante inflación: más del 30% anual, aunque el Gobierno dice que es de 8,5%; el aumento de la pobreza, del 20% a 30% de la población; cierta soberbia en la forma de gobernar; y el fracaso en imponer el 'impuestazo' al campo.
Justamente la imagen del vicepresidente argentino Julio Cobos (no peronista), que enfrentó a los Kirchner votando a favor del sector rural en el Senado, ascendió en forma meteórica de 11% a 71%, según Poliarquía. Y se perfila como presidenciable en los comicios de 2011.

En breve se verá si esta apertura a la sociedad le sirve a Fernández de Kirchner para remontar su gestión o ya es demasiado tarde.