Los prejuicios raciales podrían costar a Obama la Presidencia de EEUU

Los prejuicios raciales podrían costar a Obama la Presidencia de EEUU

• El 40% de los votantes blancos tiene una visión 'parcialmente negativa' de los afroamericanos
  
• Uno de cada tres demócratas usa alguna palabra despectiva para definir a este grupo
  

El factor racial emerge en la recta final de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Días antes del primer debate entre Barack Obama y John McCain en el profundo sur de Faulkner (Oxford, Misisipí), un sondeo de AP-Yahoo ha revelado que los prejuicios raciales entre los votantes blancos podrían costar al candidato afroamericano hasta seis decisivos puntos en la cita del 4 de noviembre.


La encuesta a 2.227 estadounidenses demuestra que el 40% de los blancos tiene al menos una visión "parcialmente negativa" de los negros. Entre los votantes demócratas, uno de cada tres utiliza al menos un adjetivo despectivo para definir de un modo genérico a los afroamericanos: "violentos", "quejumbrosos", "jactanciosos", "perezosos", "irresponsables". Entre este grupo, tan sólo el 58% de los encuestados admite que va a votar a Obama.

"Hay muchos menos racistas que hace 50 años, pero eso no significa que queden sólo unos pocos", argumenta Paul Sniderman, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Stanford, que ha puesto su estampa en el estudio. Un sondeo que saca a relucir la cuestión del techo racial que ya afloró durante las elecciones primarias, cuando Obama se midió ante Hillary Clinton y pinchó en estados como Ohio y Pensilvania. En el sur, el senador de Illinois triunfó con el abrumador respaldo del electorado negro demócrata, pero el peso de los votantes blancos independientes y republicanos ha inclinado la balanza del lado de McCain de cara a las presidenciales.
"Esta es la discusión sobre la raza que Obama no quería", apuntaba ayer el comentarista Ben Smith en su pulso electoral en The Politico. Smith recogía un comentario cazado al vuelo en Ohio durante las primarias y que define claramente la actitud de ciertos votantes blancos: "Aquí hay gente que no votaría por un hombre negro ni aunque viniera caminando sobre las aguas de la mano de Cristo y Moisés".
Obama tendría dos puntos de ventaja


En el marcador de las encuestas de RealClearPolitics, Obama seguía por delante de McCain por algo más de dos puntos, 47,6% frente al 45,3%. Los prejuicios raciales, según las proyecciones del sondeo, podrían cuantificarse sin embargo en un lastre de seis puntos para Obama por el mero hecho de ser negro. Los analistas coinciden en destacar que este factor, especialmente entre los blancos demócratas, es tal vez lo que impide que Obama se desmarque definitivamente en las encuestas y no saque todo el provecho posible del malestar político y económico.
El estratega republicano Todd Harris especula incluso con que la crisis financiera servirá para aumentar las tensiones raciales en las próximas semanas: "La trágica ironía es que aunque los problemas económicos pueden ayudar a Obama con ciertos votantes, el racismo se dispara en los tiempos duros".

Desde que Obama dio su celebrado discurso 'Una unión más perfecta' el pasado 18 de marzo en Filadelfia, el asunto racial ha pasado de puntillas por su campaña. Durante su discurso de aceptación como candidato demócrata ni siquiera mencionó por su nombre a Martin Luther King, pese a coincidir con el 45º aniversario del famoso Tuve un sueño. El estratega mayor de Obama, Daniel Axelrod, tiene un largo expediente con candidatos negros que han puesto énfasis en el mensaje postracial, en un intento calculado de derribar las barreras étnicas.
El factor 'cara a cara'


Según el sondeo de AP-Yahoo, el senador de Illinois cuenta con el respaldo incondicional del 70% de los demócratas, frente al 85% de los republicanos que se han subido al carro de McCain. La cuestión racial, más que la falta de experiencia, es el talón de Aquiles del candidato afroamericano entre sus correligionarios. La encuesta fue realizada on line ante el convencimiento de que la gente es más reacia a expresar sus prejuicios raciales cara a cara.

La metodología empleada incluye el uso de imágenes por ordenador para detectar las actitudes de los votantes y preguntas muy directas sobre "los adjetivos aplicables a la mayoría de los negros", desde "amistosos" a "violentos", pasando por "inteligentes en la escuela", "buenos vecinos", "perezosos" e "irresponsables".