Vigilantes privados son explotados ante indiferencia estatal, denuncian

Vigilantes privados son explotados ante indiferencia estatal, denuncian

Trabajadores organizados del rubro de la vigilancia privada siguen reclamando por la inoperancia de las autoridades estatales ante la explotación laboral a la que son sometidos miles de empleados por la patronal. Un grupo se manifestó ayer por el despido de varios dirigentes sindicales mientras que otro denunció la apropiación indebida del seguro del IPS.

Guardias de seguridad se manifestaron ayer frente al local de la empresa Sevipar SRL para reclamar la reposición de dos dirigentes sindicales que cuentan con foros gremiales.

Gumercindo Galeano, dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores Guardias de Seguridad y Afines de Paraguay, rechazó las explicaciones de la patronal en la que justificaban los despidos. La empresa adujo la finalización de un contrato con la Conatel, a base de un sistema de reducción de personal por antigüedad y señala que en aquel entonces se desconocía la existencia de la organización obrera.

Fiscalizadores del Ministerio de Justicia y Trabajo, así como representantes de la Defensoría del Pueblo, se presentaron en el local atendiendo a las denuncias de los empleados.

SE APROPIAN DEL APORTE

Por otra parte, directivos de la Federación de Trabajadores Bancarios, en solidaridad con el referido gremio, denunciaron que la empresa Seguridad Inteligencia y Tecnología del Paraguay no remite al IPS los descuentos correspondientes al seguro social desde mayo.

Indican que se percataron de la situación cuando el vigilante Christian Fernández fue derivado al hospital central tras sufrir un accidente en motocicleta. Poco antes que este muriera, los encargados del lugar le manifestaron a sus familiares el retraso del pago.

Galeano narró que en Paraguay unas 20.000 personas se desempeñan en este oficio con jornadas laborales que exceden las 13 horas debido a un ambiguo artículo del Código Laboral. Salarios que apenas rozan el mínimo legal, horarios nocturnos y feriados trabajados que rara vez son reconocidos, también forman parte de las prácticas patronales.

Acotó que además cada guardia debe costearse su propio equipamiento (zapatos, chalecos, armas y balas) y en la mayoría de las veces carecen del seguro de vida que establece el Ministerio Público a las empresas.

Las prestaciones de servicio normalmente se dan en las mínimas condiciones de salubridad y necesidades básicas como la alimentación o servicios sanitarios y en la intemperie sin contar siquiera con una casilla.

FALTA LEY

La falta de una legislación que fije un reglamento entre las relaciones obrero patronales y de estos con el Estado agrava la situación de los mismos.

Varios proyectos están pendientes en el Parlamento, pero los trabajadores cuestionan el carácter social y el reconocimiento de los derechos laborales que pueda tener los referidos proyectos de ley.