Los rebeldes detienen los combates para evitar la ola de pánico que asola el Congo

Los rebeldes detienen los combates para evitar la ola de pánico que asola el Congo







Las tropas tutsis del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), lideradas por el general Laurent Nkunda, anunciaron ayer un alto el fuego unilateral en la República Democrática del Congo tras tomar los alrededores de Goma, capital de la provincia de Kivu Norte. Los rebeldes aseguraron que con su anuncio tienen la intención de ev,itar una «nueva ola de pánico» después de que entre 20.000 y 40.000 personas (según las fuentes) hayan huido hacia el sur del país y la frontera con Uganda. Sin embargo, el CNDP amenaza con «nuevas represalias si continúa el hostigamiento del Ejercito del Congo».

Pese a la tregua anunciada ayer, los enfrentamientos entre guerrilleros del CNDP y las fuerzas gubernamentales congoleñas continuaron en las poblaciones de Kibumba y Rutshuru, cercanas a la frontera con Ruanda,«Creemos que el territorio ruandés sirve como apoyo al CNDP», declaró ayer Jendavi Frazer, la responsable para África del departamento de Estado de EE.UU.


Más de 250.000 civiles han abandonado sus hogares desde enero en la región de Kivu, cercana a Ruanda, que vive un «clima de terror»

«Desde nuestras oficinas podemos escuchar explosiones en los alrededores», afirmaba a ABC desde Goma Samuel Nagbe, coordinador en la zona de la organización Intermon. «En las próximas horas tendremos que valorar si continuamos en la región. Aunque no queremos abandonar porque el país va camino de una nueva crisis humanitaria», señalaba Nagbe. Una retirada de la población que ha tenido su continuidad en el propio Ejército del Congo, quien ha comenzado a abandonar la ciudad, dejándola a merced del CNDP. «Las calles de Goma están vacías y se respira un clima de terror y miedo», agregaba el coordinador de Intermon.

Pese a estas palabras, el teniente coronel Jean Paul Dietrich, portavoz de la Misión de Naciones Unidas para el Congo, la Monuc, afirmaba poco antes de conocerse el alto el fuego que los cascos azules habían «expulsado ya a los rebeldes de Kimumba» y que la situación de Goma era de «normalidad». Aunque la Monuc es con, más de 18.000 militares, la mayor misión que la ONU mantiene desplegada en el mundo, su gestión se ha mostrado insuficiente.

Fuerza europea
El Gobierno francés ha puesto sobre la mesa en Bruselas la posibilidad de que la UE envíe un «grupo táctico» de entre 400 y 1.500 militares, una opción que ya han rechazado varios países europeos. «La presidencia francesa hará una propuesta en los próximos días», señaló, en declaraciones recogidas por la agencia Efe, el ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, al término de un encuentro en París con su homólogo australiano, Stephen Smith. Sus palabras contrastan con las declaraciones del jefe del Comité militar de la UE, el general francés Henri Bentégeat, quien descartó el repliegue de efectivos militares en la zona. Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, declaró durante la visita que estos días realiza a Filipinas que «los combates deben terminar», y mostró su preocupación por que el conflicto pueda salpicar a Ruanda.

Formado en el Frente Patriótico Ruandés, partido tutsi que gobierna Ruanda desde hace 18 años, Nkunda se encuentra en la actualidad bajo el amparo del presidente de aquel país, Paul Kagame, por lo que son numerosas las incursiones del grupo guerrillero en ambos lados de la frontera con el fin de evitar -según su versión- «el genocidio que los hutus estaban practicando contra los tutsis». Una referencia a la tragedia que estalló en esta misma región en 1994, y que ha pasado a la posteridad como el genocidio más rápido de la historia con la muerte de 800.000 hutus en escasas semanas.