Reproches mutuos entre PP y PSOE

Reproches mutuos entre PP y PSOE



Los número dos de las listas electorales de PSOE y PP a las próximas elecciones europeas, Ramón Jáuregui y Luis de Grandes, se cruzaron reproches de mentir a los ciudadanos y se acusaron de no afrontar la actual situación de crisis económica. Mientras que el representante 'popular' acusó a Jáuregui de no tomar medidas, el socialista reprochó la "falta de colaboración" del principal partido de la oposición.
La situación económica dio comienzo al debate celebrado en TVE entre los candidatos de los principales partidos políticos al Parlamento Europeo. Junto a Jáuregui y De Grandes participaron los cabeza de lista de La Izquierda, Willy Meyer; Coalición por Europa, Ramón Tremosa; y Europa de los Pueblos, Oriol Junquera.
En este contexto, Jáuregui y De Grandes cruzaron acusaciones por su actuación ante la crisis y lamentaron la falta de medidas y propuestas concretas. Mientras el dirigente socialista defendió el esfuerzo del Gobierno contra la crisis, el candidato 'popular' aseguró que el crecimiento económico español durante el mandato socialista fue consecuencia de la "inercia" heredada.
"Casi ningún gobierno del mundo ha hecho un esfuerzo económico como el de España -subrayó Jáuregui-. ¿Hacia dónde? Hacia sanear el sector financiero, tirando de la demanda con la inversión pública y protegiendo a los que sufren la crisis". "Ahora hace falta que todos arrimemos el hombro", reclamó, para exigir al PP que "no se ponga de campeón del empleo" porque con el PSOE en la legislatura pasada se crearon 3 millones.
Para Jáuregui, el PP sigue sin explicar "cuál es la propuesta que hace para salir de la crisis". "Porque no he oído propuesta y las que oigo son contrarias a Europa: control de inversión, reducción del gasto público...", dijo. E instó a De Grandes a exponer medidas concretas como una apuesta por la energía nuclear o por reducir las ayudas sociales.
El representante del PP rechazó estas acusaciones y lamentó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "presuma de ser el líder más social de Europa" mientras que en España siguen desapareciendo siete mil puestos de trabajo diarios. "Sus hechos no corresponden con su acción", enfatizó.
De Grandes insistió además en la faceta española de la crisis económica. "Ha sido negado por el PSOE, primero; luego se le echó la culpa a Bush y ahora buscan brotes verdes por cualquier lado", dijo, para aclarar que el PP no se alegra de la situación. "Ojalá esos brotes sean algo que mejore el futuro, nos alegraríamos, pero nos tememos que el rumbo del Gobierno hacia el desastre no va a cambiar", dijo.
Para el candidato del PP, el PSOE echa la culpa a Europa de la crisis nacional, pero repasó al respecto a los comisarios europeos socialistas. "¿Qué han hecho ellos?", le preguntó a Ramón Jáuregui, al que le echó en cara que los gobiernos socialistas han perdido ayudas europeas para España por "ineficacia" para negociar. "Ustedes no asumen responsabilidades", concluyó. "Hay que hacer reformas, no se puede hacer de don tacredo", insistió dirigiéndose a Jáuregui.
Además, acusó a los socialistas de "mentir" a los ciudadanos cuando aseguran que el PP quiere recortar derechos a los trabajadores. Esta acusación reavivó la polémica y Jáuregui le recordó que el PP perdió la mayoría absoluta en las elecciones de 2004 "por mentir", en referencia a los atentados del 11-M. "Ustedes ganaron las elecciones gracias a la acción de un brillante mentiroso", replicó De Grandes, a lo que el representante socialista insistió en que "el único mentiroso" en los atentados perpetrados en Madrid en 2004 fue el Gobierno del PP.
Intervención pública o liberalizar los mercados


En este debate, los candidatos de La Izquierda y Europa por los Pueblos pidieron más intervención pública, mientras que el candidato de la Coalición por Europa apostó por más mercados liberalizados y comunes. Todos ellos incidieron además en la repercusión en España de la crisis y pidieron medidas concretas al Ejecutivo.
El número uno de La Izquierda, Willy Meyer, defendió ante todo la intervención pública y puso como ejemplo de su eficacia que gracias a una "modestísima" actuación como el Plan Estatal de Inversión Local "ha bajado el paro" en mayo en España. "¿Cómo es posible que Estados Unidos nacionalice General Motors y aquí con la Opel no tengamos por parte de Europa un plan de viabilidad para estar en el consejo de administración?", preguntó.
Para el candidato de La Izquierda, es necesario también afrontar cambios en dos sectores estratégicos, el energético, para el que pidió un consorcio público europeo, y el agrario, para el que pidió una reforma sustancial. "No vamos a poder hacer gazpacho", dijo sobre el crecimiento de precios. El actual modelo que "deconstruye" derechos es compartido, dijo, por el PSOE y el PP.
Por su parte, el candidato de Coalición por Europa (CEU), Ramón Tremosa, propuso para salir de la crisis "echar más carbón a la locomotora europea", y puso por ejemplo de la ventaja del euro la difícil situación de la libra esterlina. Así, insistió en la necesidad de liberalizar todos los mercados, como el de correos o el tráfico ferroviario y crear mercados europeos del agua, la energía, la educación superior o la sanidad. En cuanto a la energía, el candidato nacionalista también aseguró que sólo con energías renovables no se va a cubrir el crecimiento económico industrial y el precio va a ser demasiado elevado, un debate que instó a abordar.
Zapatero, 'Campeón del inmovilismo'


En este punto, tachó a Zapatero como "campeón del inmovilismo" y censuró que al jefe del Ejecutivo "le falta cuajo", ya que "hay que tomar medidas porque no se puede alargar la toma de decisiones". Sus ideas provocaron la reacción de los representantes de PSOE y Europa de los Pueblos, que le acusaron de estar "muy cerca" de los postulados del PP.
Para Oriol Junquera (Europa de los Pueblos), hay una crisis específica de España, cuyo origen es "una apuesta excesiva por la especulación inmobiliaria", en un modelo "compartido" por socialistas y 'populares'. "Una de las vías es asumir un poco más de déficit público para invertir en grandes infraestructuras y en políticas sociales", reclamó, para denunciar que no se haya cambiado antes el modelo productivo y España tenga "uno muy anticuado".