Conocidos y vecinos de Amaya mostraron su rechazo más furibundo por la situación "intolerable" creada con los desahucios
"Pedimos a los jueces que objeten y no firmen los desalojos", dice Sendia
NEKANE LAUZIRIKA - Sábado, 10 de Noviembre de 2012 -
BARAKALDO. El caldo de cultivo social está hirviendo. La hipersensibilidad de la población a flor de piel. Las hipotecas y los desahucios han dejado de ser tema de despacho de sucursales bancarias para pasar a ser la comidilla popular y tema habitual de tertulias. En este ambiente social, cualquier hecho y más si es un suicidio motivado por desahucios, como el caso de Amaya, levanta ampollas, pasiones y el rechazo más furibundo.
"Hay que empezar a hacer algo, Solo las movilizaciones de la ciudadanía harán que los políticos se muevan y paren esta auténtica locura. Desgraciadamente, Amaya no ha sido la primera, pero tampoco será la última", sentencia Yolanda, que solo conocía de vista a Amaya, a pesar de vivir en el mismo bloque de 48 viviendas en la zona de expansión del barrio baracaldés de Urban.
UN ABUSO INTOLERABLE "Esto es terrorismo financiero y va a estallar; no puede ser que la población estemos pagando a los bancos para que luego nos quiten los pisos y, además, tengamos que seguir pagando. Es un abuso que no se puede consentir por intolerable", añadía Mikel, agazapado tras una pancarta contra los desahucios. Junto a él, Araceli de 75 años, muestra su indignación. "Es que no hay derecho", exclama. "Esta familia se queda sin Amaya y encima van a tener que dejar su piso y seguir pagando. No hay derecho. ¿Dónde está la justicia?", se pregunta en voz alta.
Begoña no conocía a la exedil de Eibar, pero lo ha sentido profundamente. "Cuando veo en la tele que echan de sus casas a las familia, no lo puedo soportar, me duele el alma. No comprendo cómo aún no se han organizado movilizaciones sociales a gran escala", se lamentaba.
Fuera del bar La Fundación donde Amaya y su marido José Manuel solían alternar, las hermanas Bio-tza, 26 años, y Arrate, de 30, y el marido de esta, Roberto, fumaban un pitillo, mientras no dejaban de pensar en la situación tan dramática por la que debía de estar atravesando Amaya. Ante las medidas que barajan los políticos y jueces para poner freno a los desalojos, se muestran incrédulos. "No hay solución, los pobres siempre salimos perdiendo. Los sueldos bajan y los precios suben; los ricos cada vez son más ricos y los pobres lo son más", comenta con enfado Arrate, al tiempo que no puede contener las lágrimas. Ella y su marido están en el paro "y tengo un hijo. Lo único que pedimos es que haya trabajo. Es la única solución para que esto no vuelva a ocurrir", remata emocionada.
Javi, el camarero de la cafetería, no quería ocultar su indignación. "Ahora parece que debes avergonzarte por tener una hipoteca". Alfonso y Txema, de Barakaldo de toda la vida, enfundados en su buzo naranja de trabajo, son autónomos. "La cosa está muy chunga en la margen izquierda, pero no es una cuestión de zonas. Los bancos nos están robando a todos. Para sentirte mal no tienes que ser de esta margen de la ría, aunque aquí no arranca ni el tren", apuntan con ironía.
"DE PAÍS BANANERO" El suicidio de Amaya fue durante todo el día de ayer el único tema de conversación entre los clientes de La Fundación. "Lo que está ocurriendo es de un país bananero. Esto es como lo de Milana Bonita de Paco Rabal en los Santos Inocentes", añade Javi, quien reconoce que los ánimos están muy soliviantados. "No es para menos. Ya está bien de que los bancos y los políticos nos sigan machacando a los de siempre. Ahora vendrán por aquí y luego todo se olvidará y volverán los desahuciados", remata el camarero.
En esta misma línea se expresaba Ainhoa, quien conocía a Amaya y su marido de haberlos visto por el barrio. "Ves en la tele que alguien intenta quitarse la vida cuando le van a desahuciar, pero nunca piensas que va a ocurrir en tu entorno: Los dramas los contemplas desde la lejanía que parece que duelen menos, hasta que se van acercando peligrosamente. Estas situaciones nos llegar a cualquiera. Con la última reforma laboral nos pueden despedir de un día para otro. Si tienes una hipoteca y ningún respaldo familiar ya te puedes dar por jodida", dice cabreada esta joven treintañera, quien critica el apoyo a las entidades financieras, así como las pensiones millonarias de los políticos cuando se jubilan. "No tienen vergüenza, con lo que está pasando la gente y ellos perdiendo los iPad y blindándose jubilaciones", remacha.
El veterano activista abertzale Periko Solabarria sujetaba la pancarta de la Asociación Vasca de la Familia Sendia, junto a la presidenta de la organización Rosa de la Fuente contra los desahucios. El militante baracaldés recordó que en su reciente entrevista con el presidente del TSJPV, Juan Luis Ibarra, le había solicitado que los jueces se sumaran a la objeción de conciencia, "como hacen los colectivos sanitarios en los casos del aborto" y no firmaran los desahucios, "porque en estos casos la desobediencia dignifica", zanjó Solabarria.
"Pedimos a los jueces que objeten y no firmen los desalojos", dice Sendia
NEKANE LAUZIRIKA - Sábado, 10 de Noviembre de 2012 -
BARAKALDO. El caldo de cultivo social está hirviendo. La hipersensibilidad de la población a flor de piel. Las hipotecas y los desahucios han dejado de ser tema de despacho de sucursales bancarias para pasar a ser la comidilla popular y tema habitual de tertulias. En este ambiente social, cualquier hecho y más si es un suicidio motivado por desahucios, como el caso de Amaya, levanta ampollas, pasiones y el rechazo más furibundo.
"Hay que empezar a hacer algo, Solo las movilizaciones de la ciudadanía harán que los políticos se muevan y paren esta auténtica locura. Desgraciadamente, Amaya no ha sido la primera, pero tampoco será la última", sentencia Yolanda, que solo conocía de vista a Amaya, a pesar de vivir en el mismo bloque de 48 viviendas en la zona de expansión del barrio baracaldés de Urban.
UN ABUSO INTOLERABLE "Esto es terrorismo financiero y va a estallar; no puede ser que la población estemos pagando a los bancos para que luego nos quiten los pisos y, además, tengamos que seguir pagando. Es un abuso que no se puede consentir por intolerable", añadía Mikel, agazapado tras una pancarta contra los desahucios. Junto a él, Araceli de 75 años, muestra su indignación. "Es que no hay derecho", exclama. "Esta familia se queda sin Amaya y encima van a tener que dejar su piso y seguir pagando. No hay derecho. ¿Dónde está la justicia?", se pregunta en voz alta.
Begoña no conocía a la exedil de Eibar, pero lo ha sentido profundamente. "Cuando veo en la tele que echan de sus casas a las familia, no lo puedo soportar, me duele el alma. No comprendo cómo aún no se han organizado movilizaciones sociales a gran escala", se lamentaba.
Fuera del bar La Fundación donde Amaya y su marido José Manuel solían alternar, las hermanas Bio-tza, 26 años, y Arrate, de 30, y el marido de esta, Roberto, fumaban un pitillo, mientras no dejaban de pensar en la situación tan dramática por la que debía de estar atravesando Amaya. Ante las medidas que barajan los políticos y jueces para poner freno a los desalojos, se muestran incrédulos. "No hay solución, los pobres siempre salimos perdiendo. Los sueldos bajan y los precios suben; los ricos cada vez son más ricos y los pobres lo son más", comenta con enfado Arrate, al tiempo que no puede contener las lágrimas. Ella y su marido están en el paro "y tengo un hijo. Lo único que pedimos es que haya trabajo. Es la única solución para que esto no vuelva a ocurrir", remata emocionada.
Javi, el camarero de la cafetería, no quería ocultar su indignación. "Ahora parece que debes avergonzarte por tener una hipoteca". Alfonso y Txema, de Barakaldo de toda la vida, enfundados en su buzo naranja de trabajo, son autónomos. "La cosa está muy chunga en la margen izquierda, pero no es una cuestión de zonas. Los bancos nos están robando a todos. Para sentirte mal no tienes que ser de esta margen de la ría, aunque aquí no arranca ni el tren", apuntan con ironía.
"DE PAÍS BANANERO" El suicidio de Amaya fue durante todo el día de ayer el único tema de conversación entre los clientes de La Fundación. "Lo que está ocurriendo es de un país bananero. Esto es como lo de Milana Bonita de Paco Rabal en los Santos Inocentes", añade Javi, quien reconoce que los ánimos están muy soliviantados. "No es para menos. Ya está bien de que los bancos y los políticos nos sigan machacando a los de siempre. Ahora vendrán por aquí y luego todo se olvidará y volverán los desahuciados", remata el camarero.
En esta misma línea se expresaba Ainhoa, quien conocía a Amaya y su marido de haberlos visto por el barrio. "Ves en la tele que alguien intenta quitarse la vida cuando le van a desahuciar, pero nunca piensas que va a ocurrir en tu entorno: Los dramas los contemplas desde la lejanía que parece que duelen menos, hasta que se van acercando peligrosamente. Estas situaciones nos llegar a cualquiera. Con la última reforma laboral nos pueden despedir de un día para otro. Si tienes una hipoteca y ningún respaldo familiar ya te puedes dar por jodida", dice cabreada esta joven treintañera, quien critica el apoyo a las entidades financieras, así como las pensiones millonarias de los políticos cuando se jubilan. "No tienen vergüenza, con lo que está pasando la gente y ellos perdiendo los iPad y blindándose jubilaciones", remacha.
El veterano activista abertzale Periko Solabarria sujetaba la pancarta de la Asociación Vasca de la Familia Sendia, junto a la presidenta de la organización Rosa de la Fuente contra los desahucios. El militante baracaldés recordó que en su reciente entrevista con el presidente del TSJPV, Juan Luis Ibarra, le había solicitado que los jueces se sumaran a la objeción de conciencia, "como hacen los colectivos sanitarios en los casos del aborto" y no firmaran los desahucios, "porque en estos casos la desobediencia dignifica", zanjó Solabarria.
Vie 24 Mar 2023 - 17:25 por alma14
» Felices fiestas
Sáb 25 Dic 2021 - 7:00 por alma14
» Excedencia y posterior pedida de la habilitación
Sáb 25 Dic 2021 - 6:57 por alma14
» BAJA
Vie 15 Oct 2021 - 17:51 por Invitado
» Limpieza total
Mar 11 Ago 2020 - 17:45 por cliper91
» Juicio y vacaciones
Lun 10 Ago 2020 - 23:53 por alma14
» Necesito ayuda sobre el tema de requisitos de Escolta Privado
Lun 11 Mayo 2020 - 12:45 por escolta63
» que es un impacto negativo
Lun 11 Mayo 2020 - 12:43 por escolta63
» pregunta temario escolta
Lun 11 Mayo 2020 - 12:39 por escolta63
» Artículo de Alba
Lun 11 Mayo 2020 - 8:52 por alma14
» El TSJC rechaza el despido de dos gerocultoras por negarse a preparar medicación
Mar 25 Feb 2020 - 14:21 por alma14
» Comparativa Sueldos Vigilantes USA vs Alemania vs Francia vs España Por Toni -
Lun 24 Feb 2020 - 11:10 por alma14
» La empresa no puede exigir recuperar los días de asuntos propios
Lun 2 Dic 2019 - 17:05 por alma14
» El despido durante la baja médica ya es despido nulo
Lun 2 Dic 2019 - 16:49 por alma14
» Permiso retribuido en elecciones generales
Dom 3 Nov 2019 - 10:06 por alma14
» Venta de Corsys de Seguridad
Jue 12 Sep 2019 - 13:56 por popazo09
» Vigilantes barcelona
Miér 10 Jul 2019 - 15:34 por Iliess
» Infarto como accidente de trabajo
Mar 9 Jul 2019 - 19:54 por alma14
» convenio 2021
Mar 9 Jul 2019 - 19:46 por errnovato
» Tiempo TIP
Mar 9 Jul 2019 - 19:19 por alma14