Las diferencias sociales y económicas son determinantes para la salud

Las diferencias sociales y económicas son determinantes para la salud
Sectores ajenos al de la salud tienen la clave para acabar con la desigualdad
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado una investigación que ha analizado la desigualdad sanitaria que existe en diferentes puntos del globo. Durante tres años, la Comisión sobre Determinantes Sociales de la Salud ha examinado diferentes parámetros que influyen en la salud como son las diferencias sociales y la economía personal.
Esta comisión ha expuesto que "la nefasta combinación de políticas y arreglos económicos deficientes y una mala gestión política es responsable en gran medida de que la mayoría de la población del mundo no goce del grado de buena salud que sería biológicamente posible".

A raíz de las conclusiones que desprende el escrito, la OMS se ha marcado como objetivo alcanzar la equidad sanitaria actuando sobre los determinantes sociales de la salud. Margaret Chan, directora general de la OMS, ha remarcado que "la inequidad sanitaria es verdaderamente una cuestión de vida o muerte", subrayando la importancia de dicha cuestión.

La comisión ha manifestado que existen diferencias sanitarias entre países y también dentro de un mismo país. Así, demuestran que dos niños que nazcan en diferentes barrios de Glasgow (Escocia) pueden diferir en esperanza de vida hasta en 28 años. Y si la comparación se hace entre una niña de Lesotho (África) y una que nazca en Japón, probablemente viva 42 años más la japonesa.

Pero se puede afirmar, con independencia del país que hablemos, las condiciones sociales o el nivel de desarrollo de estos, que "los pobres están en peor situación que los menos pobres, pero también, que los menos pobres están peor que los de ingresos medianos, etc".



Soluciones

"La causa de las enfermedades transmitidas por el agua no es la falta de antibióticos, sino la suciedad del agua, y las fuerzas políticas, sociales y económicas que no logran proporcionar agua limpia a todos; la causa de las cardiopatías no es la carencia de unidades de atención coronaria, sino el modo de vida de la población", ha advertido la comisión, que reclama a esferas externas al sector de la salud el interés necesario.

Para la comisión de la OMS, hay tres recomendaciones que harían desaparecer las desigualdades sanitarias: la primera es "mejorar las condiciones de vida cotidianas, en particular las condiciones en que las personas nacen, crecen, viven, trabajan y envejecen"; por otra parte, "luchar contra la distribución desigual del poder, el dinero y los recursos a nivel mundial, nacional y local"; y, finalmente, "medir y entender el problema, y evaluar el impacto de las intervenciones".