La crisis del mercado enfrenta a los concesionarios con los fabricantes

La crisis del mercado enfrenta a los concesionarios con los fabricantes

Con la nefasta situación de las ventas de automóviles que el mercado español está viviendo, no es raro que surjan diferencias entre los distintos engranajes del negocio del automóvil.

Ayer, día en el que se hizo pública la mayor caída mensual en las ventas de coches desde enero de 1993, la federación de concesionarios Faconauto volvió a incidir en que esta caída aún es mayor si no se tienen en cuenta las automatriculaciones, que «inflaron las ventas de coches en la última semana de agosto» y que, según asegura, se producen porque los fabricantes obligan a los concesionarios a matricular vehículos para dejarlos en «stock» y así alcanzar unos determinados objetivos.

El presidente de la asociación de concesionarios, Antonio Romero-Haupold, aseguró a ABC que sobre todo está preocupado «por el traslado de costes que están haciendo los fabricantes frente a nosotros». Según aseguró, los fabricantes «nos importan los costes y nos exportan los beneficios, ya que nos obligan a financiar su «stock» de coches» al tener que comprar a crédito vehículos que no tienen comprador en el momento de matricularse, y que según asegura «pierden el 20% de su valor solamente por haber sido matriculados».
Comentó que «en el día 25 de cada mes es cuando se puede ver la demanda real, ya que a partir de ahí se producen exportaciones fantasma, flotas de última hora y otros movimientos de «economía canalla» que hacen que las ventas finales queden distorsionadas».
Por ello, su federación aseguró que a partir de ahora hará balance de las ventas mensuales los días 25 de cada mes, para dejar constancia de las «cosas raras» que se producen entonces.

Por otra parte, Faconauto publicó ayer datos para reflejar cómo la última semana de agosto registró matriculaciones de empresas entre dos y tres veces superiores a la media de las anteriores tres semanas. La patronal estimó que el efecto de estas automatrículas supondría una caída de cinco puntos adicionales, con lo que el retroceso de las ventas en agosto hubiera sido «del 46%».

Los fabricantes no entran
Por su parte, fuentes de la asociación de fabricantes (Anfac) consultadas por este periódico rechazaron responder a estas acusaciones de los concesionarios y aseguraron que «ellos también realizan automatriculaciones para llegar a objetivos y conseguir bonus y pluses», de la misma forma que aseguraron que estas declaraciones «se producen ahora en momentos de crisis».
Respecto a los nefastos resultados de ventas, las mismas fuentes no descartaron que Anfac vaya a rebajar de nuevo sus previsiones de caída de matriculaciones respecto al 2007 (que en la actualidad hablan de un 20%). También aseguraron que si las ventas siguen así «podrían influir en los ritmos productivos de nuestras factorías» y afectar al número de trabajadores. Las fábricas españolas, sin embargo, tienen el colchón de que los mercados europeos están cayendo menos que España, y que el 82% de la producción española se exporta.