Ocho años de cárcel por asaltar una empresa de Bellpuig e intentar matar a un vigilante

Ocho años de cárcel por asaltar una empresa de Bellpuig e intentar matar a un vigilante

LLEIDA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Lleida ha condenado a ocho años de prisión a cada uno de los tres hombres acusados de asaltar una empresa de un polígono industrial de Bellpuig e intentar matar a uno de los vigilantes de seguridad, al que deberán indemnizar con 18.100 euros por la paliza que le dieron.

El tribunal ha declarado probado que, la noche del 12 al 13 de mayo de 2007, los acusados Dragomir M. y Corneliu D. rompieron la reja metálica que cercaba las instalaciones para "sustraer lo que allí pudieran encontrar, especialmente cable de cobre", mientras el tercer procesado, Cucu D.D., vigilaba en el exterior.

La víctima, Vicente S.M., vio a un individuo dentro del recinto, por lo que bajó del vehículo con el que hacía la ronda de seguridad y se dirigió hacia él, pero el asaltante, que resultó ser Dragomir M., le empujó mientras otro de los ladrones le roció la cara con spray.

Ambos lograron tirarle al suelo y empezaron a darle patadas y puñetazos por todo el cuerpo, "llegando incluso a subirse encima de su tórax con violencia", antes de trasladarle a un descampado, donde le amordazaron de pies y manos con una cinta metálica de embalaje, trataron de asfixiarle con su corbata y volvieron a golpearle.

Cucu D.D., que se sumó a la "brutal paliza" cuando sus compinches llevaron a Vicente S.M. al descampado, y los otros dos acusados huyeron de la zona cuando saltó la alarma de la empresa. Poco después, fueron detenidos en la autovía A-2, en dirección a Barcelona.

Ese mismo día, los Mossos d'Esquadra arrestaron a otras 17 personas, seis de ellas menores de edad, por presuntamente pertenecer a una organización criminal que supuestamente robó en abril material valorado en 339.200 euros a otras empresas de Anglesola, Tàrrega y Bellpuig (Lleida).

No obstante, han sido absueltos del delito de asociación ilícita, por el que la Fiscalía solicitaba una pena de dos años de prisión y una multa de 8.640 euros para cada uno, después de que la Fiscalía retirara la acusación contra Dragomir M., Corneliu D. y Cucu D.D.

En cambio, sí les ha condenado a seis años de prisión por un homicidio en grado de tentativa al considerar que el vigilante hubiera muerto de no ser descubierto por unos agentes y atendido rápidamente. También les ha impuesto una pena de dos años por un delito de robo con violencia y uso de arma peligrosa, como el Código Penal califica al "spray que arroja gases irritantes que anulan la visibilidad de la víctima más o menos tiempo".

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Condenados a 8 años 3 ladrones que apalearon a vigilante empresa de Bellpuig

* EFE

La Audiencia de Lleida ha condenado a 8 años de prisión a tres hombres que en el 2007 intentaron robar cobre de una empresa de Bellpuig (Lleida) y que propinaron una brutal paliza al vigilante, al que dejaron maniatado en un descampado de la zona.

La sentencia condena a Corneliu D., Dragomir M., y Cucu D., los tres de nacionalidad rumana, a seis años de cárcel cada uno por el delito de homicidio en grado de tentativa, y a otros dos años de prisión por un delito de robo con violencia y uso de arma.

Asimismo, condena a los tres procesados a indemnizar al vigilante apaleado con 18.100 euros en concepto de responsabilidad civil.

Los hechos ocurrieron la madrugada del 13 de mayo de 2007, cuando los procesados se dirigieron a la empresa Top Cable de Bellpuig con la intención de robar cable de cobre.

Una vez allí, uno de los tres condenados se quedó en la furgoneta a vigilar, mientras que los otros dos entraron en las instalaciones de la empresa, situada en el polígono industrial del municipio.

Sin embargo, los dos ladrones se encontraron con uno de los dos vigilantes de seguridad de la empresa, que estaba haciendo una ronda con el coche por el exterior de la fábrica.

Uno de los ladrones empujó al vigilante mientras que el otro le roció la cara con un aerosol de defensa.

Tras tirarlo al suelo, le propinaron una brutal paliza, golpeándole con fuerza con puñetazos y patadas durante un largo rato, incluso subiéndose encima de él.

A continuación, los ladrones lo trasladaron a un descampado alejado a mas de 100 metros de la empresa, momento en que se incorporó al grupo el tercer ladrón.

El grupo dejó al vigilante maniatado de pies y manos en el descampado, llegando incluso a apretar su cuello con su propia corbata y a propinarle varias patadas para comprobar que no se movía.

Al empezar a sonar la alarma de la empresa, los tres ladrones huyeron del lugar, sin importarles el lamentable estado en que dejaron al vigilante y poco después fueron detenidos en la A-2, en dirección Barcelona.

El otro vigilante de la empresa pudo entonces auxiliar a su compañero y dar el aviso a los servicios de emergencia.

A pesar de que la defensa había solicitado que se les condenase únicamente por un delito de robo en grado de tentativa, la Audiencia considera probado que, aunque los imputados aseguraron durante la vista oral no haber tenido intención de matar al vigilante, la alta probabilidad de que los golpes le causaran la muerte tuvo que ser apreciada por los acusados.

En este sentido, la sentencia establece que la "brutal" paliza que recibió el vigilante, que le causó un neumotórax y múltiples fracturas costales, "le hubiera causado la muerte de no haber recibido asistencia médica inmediata".

"Los autores no trataron de neutralizar o inmovilizar al agredido, sino que se emplearon a fondo con la víctima, de forma desproporcional e injustificadamente bruta", añade.

"Podemos inferir esa aceptación del resultado mortal del abandono que en un lugar alejado, maniatado y fuera del alcance de ayuda donde dejaron malherido el agredido", señala la sentencia.

Además, el tribunal considera probado que los ladrones hicieron uso de instrumento peligroso al utilizar el aerosol con el que neutralizaron al vigilante y establece que, pese a que uno de ellos no participó inicialmente en la paliza, observó el resultado y el estado en el que quedó.