Escoltas vascos y navarros se sienten 'maltratados' y anuncian acciones por sus derechos

Ante la reducción de sus servicios
El colectivo asegura que defenderá su dignidad frente al Ministerio de Interior
Señalan que no pueden acceder a puestos de trabajo en sus pueblos y ciudades
Explican que esto es así porque están identificados en el entorno radical

Vasco Press | Bilbao
Actualizado martes 07/06/2011 10:00 horas

Los escoltas del País Vasco y Navarra dicen sentirse "maltratados" por parte del Departamento y el Ministerio de Interior y anuncian la posibilidad de emprender acciones "en defensa" de su dignidad y sus derechos tras las informaciones que anuncian la eliminación de sus servicios.

En un comunicado conjunto suscrito por el colectivo de Escoltas en Activo del País Vasco y ASP/92 de Navarra, reiteran la necesidad de acabar con el terrorismo para que "la plena libertad llegue a las calles de nuestras ciudades y pueblos". "Por ese motivo, los escoltas, a pesar de las permanentes agresiones de las que venimos siento objeto por parte de las mismas instituciones que protegemos, nos mantenemos en nuestros puestos", explican.

A su juicio, el colectivo de escoltas ha sido una "pieza fundamental en el engranaje que ha permitido que la libertad llegara al País Vasco y Navarra" y con los diferentes cuerpos de seguridad han posibilitado que los cargos públicos pudieran acudir a las instituciones para representar a quienes los eligieron, los ciudadanos.

En este sentido, sostienen que "jamás han dudado a la hora de proteger a aquellas personas que les fueron asignadas". "Entre el numeroso grupo de escoltas que trabaja en el País vasco y Navarra también se han producido bajas, y varios compañeros han sufrido atentados y persecución. Pese a ello, nunca hemos hecho de ello un argumento de negociación o victimismo", explican.

Tras subrayar que los escoltas no quieren "un trato preferencial o diferente" al de cualquier ciudadano, consideran que las circunstancias obligan a aclarar que el futuro laboral de este colectivo es "particularmente complicado". "Al estar perfectamente identificados por el entorno radical en pueblos y ciudades, no podremos acceder a un puesto de trabajo en nuestros pueblos y ciudades".

Por ello, dicen sentirse "maltratados" por parte del Departamento de Interior del Gobierno vasco y por el Ministerio de Interior. "La falta de información y el permanente desprecio del que somos objeto por parte de las instituciones nos han hecho valorar, por primera vez, la posibilidad de emprender acciones en defensa de nuestra dignidad y nuestros derechos", advierten.